Luego de que les fuera cancelada una reunión con funcionarios del Gobierno Federal, los desplazados de Guerrero tomaron la caseta de Tlalpan, en la Ciudad de México y dan paso libre a los automovilistas.
Este martes, el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, ofreció un encuentro con una comisión de las víctimas, pero no ocurrió, más tarde personal de la secretaría dijo a los manifestantes que la reunión sería con otro funcionario, sin embargo, tampoco se llevó a cabo.
Desde la noche del domingo, los desplazados llegaron a las puertas de Palacio Nacional para pedir el repliegue de los grupos armados en Guerrero que no les permiten regresar a sus comunidades.